Mi experiencia en la clase de Introducción a la Arquitectura

 



Lo primero que pensé cuando llegué al salón y recibí las instrucciones de los trabajos, especialmente cuando nos enviaron a ver el documental Baraka, fue: ¿qué tiene que ver esto con la arquitectura? Al principio me resultó confuso y me costó conectar esos contenidos con lo que esperaba aprender en el curso. Sin embargo, con el tiempo entendí que la intención era ampliar nuestra forma de observar el espacio, la cultura y la experiencia humana, elementos fundamentales dentro de la arquitectura.

A través de los blogs semanales, desarrollé una mirada más crítica y aprendí a expresar mis ideas con mayor claridad. Reconozco que, como estudiante, pude haber profundizado más en algunos temas, ya que en ocasiones la carga académica me llevó a reflexionar con prisa y sin explorar distintas perspectivas.

En cuanto al curso, el profesor Javier Isado nos demostró que tiene alto conocimiento sobre los temas dados en la clase de introducción a la arquitectura y su historia. El formato de la clase estaba muy organizado; en su página podíamos encontrar todos las presentaciones y videos para dejarnos llevar para nuestras reflexiones. Sin embargo, considero que la clase pudo haber sido más dinámica, con más interacción, discusiones en grupo o ejercicios prácticos que complementaran la escritura constante. Esto habría ayudado a mantener un mejor ritmo y a aprovechar aún más el conocimiento del profesor.

En general, la clase fue muy enriquecedora y sembró en mí la curiosidad para seguir investigando sobre la arquitectura. Por ende, este curso de la Introducción a la Arquitectura seguirá teniendo una gran importancia en mi futuro como Arquitecto y seguirá marcando mi manera de pensar y entender la Arquitectura.

 

 

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